¿Cómo saber si una persona consume drogas a simple vista ?

El “trastorno por consumo de sustancias” también llamado adicción a las drogas es una anomalía que afecta al cerebro y usualmente al comportamiento de una persona hasta hacerla parecer por momentos como demente – aunque para ser realistas vivimos en un tiempo en el que el mundo está loco, loco, loco, más aun con esta pandemia. Este consumo incluye sustancias como el alcohol, la marihuana y la nicotina, hasta las llamadas drogas duras, como la cocaína, heroína y morfina.



Para saber si tú amigo o tú hermano está colocado

Hay señales inequívocas y casi siempre evidentes a simple vista de que alguno de los amigos gamberros o consumidores esta estimulado  o narcotizado. Con la certeza de que Danzeria despertara la cólera de los que se identifiquen, les compartimos algunos tips para saber si tu amigo o tu hermano están colocados en plena juerga o siente los primeros síntomas de estos estados alterados:

Sensación de euforia, animación, alegría… en dos palabras: sentirse “colocado”

  • Disminuye la coordinación, por momentos los movimientos pueden ser convulsos, sobre todo consumiendo coca en una fiesta o rave.
  • Percepción más intensa de los sentidos de la vista y  el oído. El exceso de coca expande las pupilas y los ojos parecen desorbitados.
  • Ojos rojos, esto sucede con el consumo de la hierba.
  • Dificultad para concentrarse o recordar cosas que han sucedido hace pocos momentos.
  • Sequedad de boca con el consumo de hierba y exceso de salivación en el caso de la coca.
  • Tiempo de reaccionar más lento y movimientos muy suaves y letárgicos, cuando se ha consumido éxtasis, ketamina y otras drogas de laboratorio.
  • Ansiedad o pensamientos paranoicos, que pueden llegar a alucinaciones o respuestas inconexas.
  • Olor a cannabis en la ropa o color amarillento en las puntas de los dedos
  • Antojos dramatizados de determinados alimentos a horas inusuales, conocidos como los populares monchis o bajón.

No se aguanta y se coloca antes de salir de la oficina

Cuando el consumo es recurrente y diario, a un largo plazo se vuelve crónico y se relaciona con disminución severa de la agudeza mental, sobre todo al hablar. Faltar a la escuela o al trabajo es otra de las señales, y en algunos casos con un desempeño deficiente y caótico en el entorno laboral. En el ambiente profesional o estudiantil es muy normal que los compañeros reconozcan cuando alguno estuvo de juerga o un viernes por la tarde, no se aguante y se coloca antes de salir de la oficina.

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¿Le suenan las sales de baño, el Spice y la K2?

Casi todos los lectores saben de lo que estamos hablando, no se hagan los guarros que es otro síntoma de que estas colocado. Los cannabinoides sintéticos y las catinonas sustituidas o sintéticas, son a nivel  general los dos grupos de drogas sintéticas más conocidas…

¿Quién no las consumió en un rave?

Son ilegales en casi todos los países y en las comunidades autónomas españolas. Aunque suene a que hablamos como tu mama, hay que tener cuidado cuando no se sabe con certeza su procedencia, porque pueden ser impredecibles y peligrosas.  En casi todos las ocasiones ninguna se somete a un control de calidad – si podemos asegurar que el que las cocina y su amigo más cercano las probó antes que vosotros –  y se producen con ingredientes de muy mala calidad o incluso con ingredientes improvisados.

Cannabinoides sintéticos rociados sobre hierbas secas

Algunos acostumbran rociar cananabinoides sintéticos sobre las hierbas secas y luego son consumidas hasta la última brizna. Aunque también pueden prepararse e ingerirse como si fuera una infusión, un mate o un té de hierbas. Aunque los “fabricantes” aseguran que son productos naturales, solo por la manera de consumirse, se trata de compuestos químicos que provocan un “viaje” un tanto similar al que produce la marihuana y se han convertido en una alternativa popular con la que se sale del paso.

Cocaína, anfetaminas y Éxtasis

Estas son las llamadas catinonas sustituidas que son muy psicoactivas y alteran la mente, como las anfetaminas, el éxtasis o MDMA y la infaltable cocaína. Las famosas sales de baño, que no lo son, o los jarabes para la tos. Unas pueden inhalarse, comerse, tragarse, esnifarse o inyectarse, dependiendo del estado alterado. Los síntomas y signos son evidentes a simple vista: una mayor sociabilidad, euforia, agitación y energía inusitada, aumento del deseo sexual y la cachondera. No pensar con claridad y titubear o la pérdida del control muscular son otras, al igual que los ataques de pánico o la paranoia. En los casos más extremos donde se ha excedido la dosis pueden hacerse evidentes las alucinaciones, el delirio y en ocasiones conductas y actitudes violentas y/o psicóticas.

Otros síntomas que pueden delatarte

Como si fueran pocos todos los datos que les hemos compartido, ahora les lanzamos otras señales:

  • Hablar rápido o de manera explosiva, siempre es el resultado de consumir estimulantes.
  • Tos que no se calma.
  • Pronunciación lenta o mala, por consumir depresivos o
  • Ojos inyectados de sangre… (No escatimes y compra gotas)
  • Olor o aliento inusual, cuando usas drogas inhaladas.
  • Pupilas considerablemente grandes (dilatadas) o extremadamente pequeñas (puntiformes)
  • Movimiento ocular rápido (nistagmo), podrían ser un signo del consumo de PCP.
  • Inapetencia, con el consumo de anfetaminas, metanfetaminas o cocaína.
  • Aumento del apetito, con el consumo de marihuana.

 

Hablan los que saben

Los doctores Jack E. Henninfield, del Instituto Nacional de Abuso de Drogas en EE UU, y Neal L. Benowitz, de la Universidad de California, elaboraron estudios que dieron como resultado cuadros de adicción, tomando en cuenta factores como el terrible síntoma de abstinencia cuando se detiene el consumo, la tolerancia y la dependencia que se expresa en necesitar dosis cada vez más grandes. Según el estudio, la reina de estas drogas es la heroína – perfecto le quedó el nombre – porque es la que tiene la mayor capacidad para crear adicción.

La Dopamina: en búsqueda de la felicidad

La heroína y algunas otras drogas activan los neuro receptores del cerebro, encargados de la producción de la dopamina, conocida como la hormona de la felicidad. ¿Sera esta la causa de tantos consumidores?

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