El problema de comprar drogas de dudosa procedencia son los efectos colaterales, dados por la poca pureza de los productos en su síntesis; por ello hay que ser un buen psiconauta y documentarse sobre lo que se ingiere.
En la movida electrónica del Reino Unido se encuentra en los circuitos de distribución clandestina un lote de pastillas de MDMA adulteradas con un alto grado de PMB.
Su ingesta tuvo desafortunadas consecuencias para el público masculino, porque estas pastillas adulteradas pueden reducir permanentemente los capilares de los genitales del hombre, causando crónicos problemas físicos y psicológicos en las victimas intoxicadas por este fármaco, razón por la cual, la comunidad de música electrónica se encuentra en estado de alerta.
Entre las primeras víctimas se encuentran hombres que desean mantener el anonimato y explican cómo sus penes se achicaron de forma descontrolada, causando graves problemas maritales. Un detalle irónico, quizás, es que esta pastilla tiene la forma de un pene erecto.
