NoiZe es una revista gay que comenzó llamándose Circuit NoiZ; el editor es Steve Weinstein, creador del concepto del “circuito”: un consorcio de fiestas dance gay que han dado la vuelta al mundo.
Mickey Weems, un reconocido etnógrafo considera estos eventos como rituales sagrados. Por otro lado, el dramaturgo Larry Kramer ha denunciado estas “fiestas” como expresiones comerciales y mercantilistas que promocionan conductas autodestructivas, escudándose en un supuesto activismo político.
Y así, infinidades de hombres gays se molestan al extremo, pues consideran que plantean los peores estereotipos de los hombres gays, con actividades autodestructivas y peligrosas, donde reina el sexo inseguro y sin control, además del abuso indiscriminado de drogas… La polémica está servida.
¿Por qué una revista gay?
Circuit NoiZe es una revista de circulación nacional en los Estados Unidos, que cubre la movida gay. Fue fundada en 1993 con la intención de enfatizar la parte espiritual de estos circuitos, planteando el “poder espiritual” de un supuesto “organismo integrado en el dance floor”.
Esto como una reinterpretación de los rituales sagrados de las religiones pre monoteístas. Sin embargo, este concepto es más antiguo, pues ya lo había planteado Bruce Mailman.
“The Saint” era un mega club en el lado este de Nueva York, fundado por el difunto Mailman y fue en esa discoteca gigantesca que se inició el “Black Party”, la que se convirtió en el primer evento que planteó este concepto “espiritual”. Se convirtió en su fiesta insignia y se transformó paulatinamente en una “fija” de todos los sábados.
Era un “viaje” tántrico y musical de 18 horas, donde miles de miembros de la movida gay bailaban en una especie de trance. En una declaración de su doctrina, afirmó: que los antiguos rituales druidas de la primavera fueron la inspiración para estas “Black Party”.
El club estaba condenado por la aparición del VIH – Sida que aniquiló a casi todos sus miembros. Pero los DJs se encargaron de esparcir “la semilla” que cosechó como frutos la Red Party en Columbus, Ohio y las White Party de Miami y Palm Springs.
¿Se ha perdido la inspiración original? ¿O está en proceso de cambio?
Fuente: http://thump.vice.com/
Por: Marcos Pérez Briñez
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