Todos los que han ido a Burning Man, por lo menos una vez, dicen que volverían todas las veces que se les fuera posible ya que es una experiencia única, y el creciente número de personas que se adentran al desierto de Nevada cada año para vivirlo es prueba de esto.
No importa que edad tenga y cuales sean tus gustos, siempre encontraras algo interesante y divertido que hacer en este evento. Las razones para ir son infinitas, aquí les dejamos algunas:
Temple of Grace
Esta hermosa estructura es una de muchas que podrás encontrar al ir a Burning Man. Disfruta del talento y la maravilla de la imaginación de los artistas que exhiben sus piezas.
Vuelve a ser joven
¿Eres de esos que le encanta escalar cosas? Hazlo en Burning Man. Aquí de seguro te volverás a sentir joven.
Espera visitas inesperadas
Burning Man es conocido por ser el lugar en donde encontrarás a las personas más extrañas del planeta. No te sorprendas cuando veas personas llegar al festival de la manera más singular que se les pueda ocurrir.
Paseos en bicicleta
Si en algún momento te cansas de escuchar música, puedes ir tranquilamente a hacer un relajante paseo en bici.
Paraíso para los amantes de la pirotecnia
El nombre mismo lo dice «Burning Man», así que espera ver muchos fuegos artificiales y que quemen varias cosas.
Actividades en grupo
Burning Man ofrece un sinfin de actividades en grupo que puedes realizar. Si vas solo, podrías hacer un nuevos amigos.
Momentos románticos
Si vas con esa persona especial de tu vida, en algún momento de la noche podrías ir a tener un encuentro romántico e incluso pedirle matrimonio.
Atardeceres mágicos
¿Cansado? Busca un buen lugar y disfruta de uno de los atardeceres más hermosos del mundo.
Libertad absoluta
¿Quieres ir a brincar en un trampolín? Hazlo ¿Quieres ir a mojarte y bailar entre lodo? Hazlo ¿Quieres estar completamente desnudo? ¡Hazlo! Burning Man se creó con la intención de no limitar a las personas, sus organizadores quieren que sea un espacio libre de prejuicios donde todos puedan expander sus sentidos y darle rienda suelta a su imaginación.