Las drogas están dejando de ser un tabú en el mundo, y prueba de ello son los diferentes estudios que han permitido la legalización e inserción paulatina de los fármacos en el rol social. Estas circunstancias han debilitado las políticas “cero drogas”, ofreciendo una oportunidad para la aplicación de políticas de “reducción de riesgo”.
Recientemente, el estudio realizado por The European Monitoring Centre for Drugs and Drug Addiction (EMCDDA), afianza cada vez más la necesidad de las políticas de “reducción de riesgo”.
El estudio del (EMCDDA) demostró que Ámsterdam, Amberes y Barcelona son los principales productores y consumidores de MDMA, lo que incrementó su uso en el territorio europeo, donde 2,1 millones de individuos de edades comprendidas entre 15 y 34 usaron el fármaco el año pasado. Con estas cifras, el MDMA ha transcendido de los locales subterráneos, para cobrar una mayor presencia en las fiestas y bares cotidianos.
En cuanto al consumo ilegal de fármacos, el estudio señaló que la cocaína es el estimulante más usado en los escondrijos y callejones de las ciudades de Europa. El “toque” de cocaína se da más en los individuos de las partes orientales y septentrionales del continente. Entre los países con mayor presencia de su consumo se encuentran: Reino Unido, Países Bajos y España.